Aunque la mayoría de los embarazos dan como resultado el nacimiento de un bebé sano, a veces algo funciona mal desde el comienzo. Los embarazos ectópicos y molares son ejemplos de ello. Lamentablemente, ni los embarazos ectópicos ni los molares dan como resultado el nacimiento de un bebé. Sin un tratamiento rápido, pueden poner en peligro la vida de la mujer embarazada.